Esta especie protegida es una de las más emblemáticas del litoral valenciano y en los últimos años ha visto degradado su hábitat natural por la construcción masiva en costas y parajes naturales que amenazan su supervivencia, según informó Paradores.

A partir de ahora, el Parador de El Saler (Valencia) permite que las tortugas mediterráneas cuenten con un espacio seguro donde puedan acostumbrarse de manera progresiva a volver a vivir en libertad y volver al medio más gradual y fiable, lo que aumenta su índice de supervivencia.

Para ello, se ha instalado un pequeño poblado de reproducciones a escala de las antiguas barracas valencianas, un lago y vegetación autóctona para conseguir un oasis de biodiversidad en el nuevo hogar de estas tortugas hasta que se encuentren preparadas para regresar a hábitat natural: el Parque Natural de L´Albufera.

La ONG Xaloc Mar insistió en la importancia de conocer la diferencia entre estas tortugas terrestres autóctonas y otras especies invasoras, como la ‘Trachemys scripta’, por lo que este santuario es un espacio controlado y protegido para ejemplares previamente seleccionados y no se permite la libre introducción de animales ajenos a este programa de conservación de la biodiversidad.