El Partido Nacionalista Vasco (PNV), Euskadiko Ezkerra (EE), Eusko Alkartasuna (EA) y Herri Batasuna (HB) insistieron en que el acuartelamiento fue ocupado sin licencia de habitabilidad del ayuntamiento.

En su opinión, con ello, ha vulnerado un acuerdo municipal, adoptado el 14 de junio de 1990, por el que se acordó negociar con el Ministerio de Interior para que estas viviendas fueran ocupadas por vecinos de la zona.

El alcalde de Bilbao, el nacionaista Josu Ortuondo, anunció que ya ha mantenido conversaciones con el consejero de Interior y que éste se ha comprometido a transmitir la petición al ministerio.

Por su parte, el PNV expresó al Gobierno Civil la preocupación del consistirio por la seguridad del edificio.

Los nacionalistas anunciaron que el municipio ofertaría un solar alternativo que "cumpliera mayores medidas de seguridad en el caso de que el Gobierno Civil accediera a abandonar el edificio de Txurdínaga mediante una permuta".GRAN POLEMICA

El asunto levantó gran polémica en el pleno municipal, en el que el portavoz del Partido Socialista en Euskadi, Rodolfo Ares, mostró en todo el momento su disconformidad con este proyecto, al considerar que "una sociedad democrática tiene que proteger a los más débiles y, desgraciadamente, en este país, son los guardias civiles".

Sin embargo, el PNV, EA y EE insistieron en que la decisión adoptada en el pleno no es una cuestión política, sino "una necesidad de adecuar el edificio, pra que sea ocupado por las numerosas familias de la zona, inscritas en una larga lista de espera".

Por su parte, los responsables del Gobierno Civil afirmaron que no tienen conocimiento de ninguna gestión por parte del ayuntamiento para llevar a la práctica el acuerdo del pleno del 14 de junio de 1990.

También aseguraron que la previsible expropiación no tendrá lugar "en ninguno de los casos, porque el solar y el edificio son propiedad de Interior".