La compañía papelera ha logrado abandonar las pérdidas y llegar a esta cifra de beneficios gracias a una facturación de 9.666 millones en el período citado, que supone un crecimiento del 38%.

La empresa ha destacado que, gracias a esta positiva evolución de las ventas, se ha producido una "importante mjoría" en la liquidez. Asímismo se ha logrado reducir el endeudamiento bancario.

De hecho, la deuda bancaria a finales de septiembre de este año era 1.685 millones menor, despues de financiar las inverisones previstas en el plan estratégico y las corrientes.

Con ello, la deuda neta bancaria suponía, a final del tercer trimestre, del 45% sobre recursos propios, frente al 140% con que había comenzado el año.

Con estos resultados, se ha recuperado, pues, el equilibrio en los recursos propios y e ha logrado ofrecer a los accionistas un dividendo a cuenta de los resultados de 1995 del 3,5% del nominal de las acciones.