Bulgaria, Chipre, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Malta, Polonia, República Checa, Rumanía, Eslovaquia, Eslovenia y Turquía serán los nuevos miembros de la Agencia Europea del Medio Ambiente.

Su adhesión permitirá a este organismo presentar evaluaciones sobre el entorno de toda Europa, y los países candidatos se beneficiarán de la asistencia de la Agencia para la aplicación de sus propios sistemas de vigilancia. La recopilación y análisis de los dtos uniformemente permitirá elaborar comparaciones fiables sobre el estado del medio ambiente en los diferentes países.

La Agencia también puede ayudar a los candidatos a garantizar la aplicación de la legislación comunitaria en este ámbito, y su participación en las actividades de este organismo les acercará a las políticas y métodos de trabajo de la UE. Además, podrán acceder a ayudas financieras, especialmente del programa Phare, para poner en marcha redes de recopilación de datos durante los 3 prieros años de su participación en la Agencia.

Por otro lado, los países candidatos estarán obligados, como los demás miembros de la Agencia, a contribuir económicamente en su funcionamiento y a suministrar regularmente datos medioambientales, para lo cual deberán establecer las infraestructuras necesarias.

La Comisión comenzó las negociaciones con los países candidatos en marzo de 2000, después de recibir el mandato del Consejo. Este proceso finalizó el 9 de octubre con la firma del acta final de os acuerdos bilaterales. Las propuestas del Ejecutivo comunitario (una por país) deberán ser adoptadas por el Consejo y los países candidatos para que puedan entrar en vigor. Su objetivo es que comiencen a unirse a la Agencia en 2001.