Lasa afirmó, en declaraciones a la Ser, que la reconciliación es lo que promovía su marido y es la base de la convivencia, ya que si no existe, es "imposible que se pueda vivir aquí en paz".

Destacó que "tiene que haber un momento en el que esto se termine", para lo que es necesario el "respeto a la opinión del otro, tolerancia, todos esos valores que son muy importantes y que deberíamos inculcar en la juventud".

Respecto al temor expresado por el Colectivo de Víctimas del Terrorismo dl País Vasco (COVITE) de que esta reconciliación se convierta en olvido o impunidad, Lasa aseguró que estos son conceptos que ella no contempla.

Se refirió, a este respecto, a que recuerda todos los días a su marido y quiere que juzguen a sus asesinos, pero advirtió de que "lo que no puede uno es encerrarse en su dolor; hay que abrirse a los demás y compartir ese dolor con otra gente".

Sobre el trabajo que va a realizar en el cargo para el que ha sido designada por el consejero de Interior, Javie Balza, explicó que va a centrarse "en ayudar a las víctimas, en solucionar sus problemas personales de todo tipo".

Esto pasará, entre otras cosas, por facilitar ayuda psicológica a estas personas y darles asesoramiento para que solucionen todo tipo de trámites administrativos. Además, se prestará atención a los amenazados por ETA y su entorno, incluso facilitándoles que cambien de domicilio.