Según las estadísticas del Ministerio de Defensa, en 1998 se registraron 346 solicitudes de ingreso, mientras que en los nueve primeros ciclos de 2002 sólo e presentaron 90, cifra que significa una reducción de casi el 74 por ciento en el número de aspirantes.

El Ejército de Tierra es el que más demandas registró, con 79 solicitudes, frente a las 244 que se gestionaron en 1998. Le sigue la Armada, con 7 peticiones este año y 71 hace cinco ejercicios, y finalmente se sitúa el Ejército del Aire, que tuvo 4 peticiones este año y 31 en 1998.

La tendencia descendente no ha sido constante en estos cinco años. Si en 1998 el número de peticiones de ingreso scendió a 346, al año siguiente, coincidiendo con la tregua decretada por ETA, se alcanzó el mayor número de solicitudes, con 407.

Esta tendencia comenzó a invertirse en el año 2000, cuando se gestionaron 401, y ya el pasado año se produjo una drástica caída en las solicitudes, que sólo alcanzaron las 165, para quedar en 90 en el año 2002.