Con la tranquilidad de que el PNV no está "condicionado" por ningún otro partido para gobernar, Ibarretxe dejará claro a sus interlocutores que ahora es imprtante separar la formación del nuevo Ejecutivo y su gestión, de la apertura de un nuevo foro para tratar de conseguir la paz.

Si la constitución del Gobierno corre prisa y podría estar culminada en el mes de julio, los pasos dirigidos a la consecución de la paz deben ser más cautelosos y estar presididos por la serenidad de todos los participantes. Desde el PNV reconocen que este último proceso llevará más tiempo.

Este será uno de los principales mensajes del lehendakari en funciones a los partios políticos con los que se reunirá esta semana. Mañana, martes, recibirá en Ajuria Enea al líder de EH, Arnaldo Otegi, para quien su mensaje será claro: sólo el rechazo inequívoco de la violencia y la aceptación de las vías democráticas puede propiciar el diálogo y la colaboración.

De hecho, Ibarretxe se plantea no invitar a EH a una segunda ronda de contactos reservada únicamente a aquellos partidos con los que el PNV podría encontrar puntos de encuentro para gobernar conjuntamente o pactar apoyos prlamentarios concretos. También está descartada la incorporación de la formación abertzale al foro de la paz, al menos en un primer momento.

Para hacer un gobierno con amplio apoyo parlamentario, el PNV confía en EB-IU, cuyo líder, Javier Madrazo, ya manifestó la pasada semana a Ibarretxe su disposición a participar en el gobierno, sobre todo si el PSE acepta también colaborar.

Precisamente el PSE es clave en la estrategia de distensión del PNV tras las elecciones. Ibarretxe transmitirá a Redondosu buena disposición al diálogo e incluso a llegar a acuerdos puntuales o de envergadura durante esta legislatura.

Con el PP, el objetivo de Ibarretxe será lograr la normalización de unas relaciones que han sido de enfrentamiento abierto durante los últimos años. Por el momento, los nacionalistas valoran positivamente la asistencia de Mayor Oreja a la ronda de contactos y esperan que esa actitud de los dirigentes del PP tenga continuidad.

Como mensaje genérico a todos los partidos con los que se eunirá, el lehendakari en funciones propondrá que todas las formaciones políticas hagan un esfuerzo por alejar de la contienda política los asuntos relacionados con las víctimas del terrorismo, asunto que debe estar por encima de los enfrentamientos entre partidos.