En una entrevista publicada en "Gara", Otegi califica de "pérdidas evidentes" las detenciones de personas vinculadas con este movimiento porque, según añade, éstas "pueden dinamizar labores importantes" dentro del nacionalismo radical.

El dirigente de Batasuna asegura que el Estado español busca "el cuerpo a cuerpo" con la izquirda "abertzale", que, como respuesta, debe responder con "a más represión, más mapa y más autodeterminación".

Otegi señala que Batasuna sigue "pensando" que ETA "tiene voluntad de transformar el conflicto" que, según él, padece el País Vasco. Por este motivo, no acepta que se aplique una "dinámica de trueque" al abandono de las armas por parte de la banda terrorista, en el sentido de que se hagan ciertas concesiones al nacionalismo radical a cambio del fin del terrorismo.

Sobre el PNV, el portavo de Batasuna tilda de "absolutamente hipócrita" que defienda por encima de todo el derecho a la vida y asegura que el derecho de libre determinación "es la clave de bóveda para avanzar hacia la resolución del conflicto" y que "va a permitir el desarrollo íntegro de todos los (demás) derechos".

Afirma que el partido liderado por Xavier Arzalluz "clona" el discurso de la izquierda "abertzale", "en nombre de la autodeterminación, de la territorialidad, de la consulta popular, de la construcción nacional..", pero que no pretende superar el Estatuto de Guernica ni dejar que "el pueblo hable con voz propia", sino que pretende imponer su discurso "en nombre del pueblo vasco".

Por último, Otegi compara al presidente del Gobierno, José María Aznar, y el líder del PP vasco, Jaime Mayor Oreja, con el presidente de los Estados Unidos, George Bush, al sugerir que con operaciones como la de Gestoras pro Amnistía están preparando el camino para la ilegalización de Batasuna, "como hizo Bush antes de bombardear Afanistán".