Mayor Oreja dijo a Rne que este paso adelante del Ejecutivo de Vitoria "ha confirmado un diagnóstico que algunos introdujimos en el momento en el que Ibarretxe tomó posesión".

Ese diagnóstico es que el PNV "no ha abandonado Estella", sino qe sólo ha ralentizado su marcha pero cumpliendo "milimétricamente" todos sus postulados, incluso de forma "más clarificadora" que antes. "Se han quitado todos la careta, sabemos exactamente lo que pretenden, y es una manera de decir que Estella está vivo".

De la misma forma que ETA mató a Miguel Angel Blanco "a cámara lenta" en el momento en el que le secuestró, Mayor Oreja se mostró convencido de que tras esta reclamación de transferencias se esconde "una declaración de guerra política a España, a Frncia, reivindicando las siete provincias y la autodeterminación".

Mayor Oreja se mostró convencido de que el primer paso de esta estrategia del nacionalismo fue romper la buena relación entre el PP y el PSOE, confiando para ello en la "defenestración" de Nicolás Redondo Terreros, pero sin contar con la Ley de Partidos, que fortalece a los demócratas.

Ante esta situación, Mayor Oreja abogó por reaccionar "con serenidad", pero también con toda la fortaleza del Estado de Derecho, que tiene instrumenos como, por ejemplo, la Ley de Partidos, "que debe ser aplicada".