"En Euskadi sobran las trincheras dialécticas", consideró Llamazares en una nota de prensa. "Desdenuestra formación consideramos que ninguno de estos dos ejemplos sirven para ayudar al necesario entendimiento que precisa Euskadi y lo único que logran es pervertir el debate político y el imprescindible entendimiento entre nacionalistas y no nacionalistas".

El dirigente de IU lamentó "el tono y la forma" empleados por Arzalluz durante el "Aberri Eguna" y advirtió al dirigente nacionalista de que "ni el PNV ni ninguna otra formación política contará con el apoyo de Izquierda Unida para poner en march aventuras rupturistas o cualquier proyecto disgregador, sea del signo que sea".

Llamazares indicó que IU "pondrá encima de la mesa una oferta de convivencia, basada en un proyecto federalista e integrador que intente dar respuesta a las necesidades que demanda la inmensa mayoría de la sociedad vasca, porque ya está bien de planes que defiendan sólo a una parte y que, al final, acaban siendo más el origen del problema que una auténtica solución".

El coordinador general de IU hizo un llamamiento ala moderación a todas las fuerzas políticas de Euskadi ya que, a su juicio, "entran en una gran contradicción todos aquellos que dicen defender la convivencia partiendo de lenguajes bélicos que en absoluto reflejan las necesidades de un pueblo que de forma reiterada ha expresado que quiere vivir en paz".