A su juicio, los nacionalistas vascos deben decidir "si prefieren tener un Estado, tener patria pero a costa de los ciudadanos, o a la inversa".

Guevara afirmó en la Ser que el proyecto del "lehendakai" vasco, Juan José Ibarretxe, de convertir Euskadi en un Estado asociado a España, no garantiza que en el País Vasco se vaya a vivir mejor y que se vaya a acabar con ETA, al tiempo que se mostró convencido de que no solucionará el "conflicto vasco", porque "no se presenta con un carácter definitivo; se presenta siguiendo sin renunciar a la aspiración máxima, que es la independencia".

Consideró que la estrategia actual del PNV es muy peligrosa, porque se puede "caer en una democracia plebiscitaria", qe es el sistema "más manipulable y en el fondo más deficiente de todos". A su juicio, el referéndum que se plantea "requiere una serie de características y de requisitos para que sea verdaderamente limpio y democrático", que en estos momentos "no se dan ni de lejos en el País Vasco".

Además, señaló que "en estos momentos Ibarretxe juega con la ventaja de que estamos en una sociedad muy harta, muy cansada, incluso con los resortes morales muy bajos, y entonces es muy fácil que cale el populismo y la deagogia". Guevara considera que el "lehendakari" no se da cuenta de que está produciendo, si cabe, todavía una mayor división o fractura en la sociedad.

Respecto a su candidatura como independiente en las listas del PSE-EE, explicó que ha tomado esta decisión porque "llega un momento en la vida en que ya no basta con escribir cada mes y medio un artículo en el periódico, o dar una conferencia o una ponencia, o decir que somos todos muy solidarios".

"Hay que vivir allá (en el País Vasco) para darsecuenta de lo que supone ser, en estos momentos, concejal, juntero, parlamentario o diputado del PP o del PSOE", agregó el ex dirigente del PNV, quien indicó que es en la lista socialista donde se siente "más cómodo y más identificado" y donde podrá seguir diciendo lo mismo que ha dicho durante 20 años.

Finalmente, aseguró que en el PNV "es bastante incómodo y difícil alzar la voz", porque las tácticas de "demolición personal" contra los disidentes son muy duras de soportar y existe "miedo" dentro de l formación nacionalista a discrepar.

"En el PNV siempre ha habido personas autonomistas, no independentistas. Tenemos los nacionalistas vascos que aprender bastante del nacionalismo catalán y saber separar esa ecuación a veces maldita entre nación y estado, que hoy en día no tiene sentido", finalizó.