Tras conocerse el contenido de la pastoral, el ttular de la diplomacia española se entrevistó con el nuncio de la Santa Sede en España y el embajador en el Vaticano transmitió las quejas del Ejecutivo español.

Piqué aseguró que la "reacción" ha sido de "gran comprensión" respecto a lo que planteaba el Gobierno español. Además, el ministro aprecia que en la Santa Sede hay "preocupación sobre una pastoral que puede ser una pastoral claramente inadecuada desde un punto de vista de las consideraciones políticas que hace pero también morales".

Ahor, el Gobierno español espera que "el Vaticano haga lo que considere oportuno", decisión que el Gobierno conocerá a lo largo de esta semana.