El portavoz del foro, José Luis Orella, dijo a Servimedia que el Santo Padre ha puesto de manifiesto que hay que saber diferenciar "un nacionalismo radicalizado de un sentimiento patriótico".

Orella señaló que los prelados vascos también deben de tener en cuenta la reflexión realizada por Juan Pablo II este fin de semana respecto a la importancia de "la unidad nacional de Españ dentro de su diversidad".

En este sentido, este portavoz destacó que también puede deducirse de las palabras del Papa que es una equivocación el sostener que el País Vasco es una nación en función de factores étnicos o sanguíneos.

Al mismo tiempo, Orella dijo entender que dirigentes del PNV, como su presidente, Xabier Arzalluz, o su portavoz en el Congreso, Iñaki Anasagasti, se hayan mostrado críticos con la forma en que se ha realizado la visita papal y los mensajes que se han transmitido.

En este sentido, manifestó que lo que ha hecho Juan Pablo II es poner de manifiesto la importancia que ha tenido España en la expansión del cristianismo, tanto en Europa como en América, y que esto "no puede irse al garete por un nacionalismo de signo totalitario que defiende otro tipo de valores".