Trias leyó un comunicado oficial de la dirección de CiU, y en la rueda de prensa evitó pronunciarse sobre la posibilidad de rubricar el acuerdo si se modifica el texto, por enteder que el pacto es "inamovible" esde el principio.

Así, ratificó la voluntad de la coalición de no firmarlo, a pesar de respaldar plenamente los diez puntos contenidos en él. En consecuencia, advirtió de que CiU "no podrá asumir las decisiones políticas que el PP y el PSOE adopten en la aplicación de estos puntos sin previo conocimiento y consulta".

Acto seguido, Trias reiteró la voluntad de CiU de continuar su defensa de la democracia, de la lucha contra el terrorismo, del diálogo, de la paz y del reconocimiento de la pluralidd del Estado que han mantenido durante los últimos 25 años. "Línea que viene siguiendo sin iflexiones coyunturales, ni partidistas y con absoluta lealtad", apostilló.

El portavoz parlamentario de CiU leyó un extenso comunicado como respuesta a la "insistencia", sobre todo mediática, para que CiU modifique su postura apelando a su historia. "Es justamente sobre la base de esta trayectoria por lo que creemos que no debemos adherirnos al acuerdo PP-PSOE", contestó.

MODERACION Y RESPONSABILIDAD

Tris recordó que la coalición siempre ha contribuido a la consolidación de la democracia actuando "con moderación y con sentido de la responsabilidad", y se ha movido siempre en el marco constitucional a pesar de "una cierta decepción" por la forma en que se ha orientado su aplicación.

"Nuestra fidelidad constitucional ha sido y será compatible con la reclamación que hacemos y que haremos del reconocimiento del carácter plurinacional de España", aseguró.

En la misma línea, recordó que CiU ha respald siempre la lucha contra ETA, nunca ha utilizado este asunto como arma política, ha apostado por el diálogo y ha reiterado la necesidad de contar con todos los vascos "no violentos" para eliminar el terrorismo, sean o no nacionalistas.

En este punto, se mostró convencido de que el PNV juega un papel "determinante" y ningún intento de solución "debe ignorarlo ni arrinconarlo".

Como conclusión de toda esta argumentación, Xavier Trias insistió en que CiU comparte los diez puntos contenidos en el acurdo, pero no "el espíritu que desprende", por entender que no se corresponde con la necesidad de diálogo con todos los demócratas.

"Nuestra coalición podría firmar los diez puntos en cuestión. La gravedad del tema le haría pasar por alto alguno de los puntos de desacuerdo, a pesar de ser importantes. Pero lo que no puede aceptarse", concluyó, "es el espíritu poco dialogante y la manifiesta voluntad, sobre todo en el prólogo, de dejar de lado a las fuerzas nacionalistas no violentas y democráticas. No o podemos aceptar porque conduce a la ruptura social y a la impotencia política de todos, del País Vasco y finalmente también de la sociedad española, en relación con el País Vasco".