Atutxa hizo estas declaraciones en el Congreso de los Diputados, después de reunirse con el presidente, Federico Trillo, en su primera visita a la Cámara Baja.

En su opinión, "tratar de reponer, en aquello que sea reparable, a las víctimas del terrorismo y otro tipo de violencias por parte de las instituciones públicas, y tratar de reconocer el dolor que han tenido que padecer quien más directamente han padecido el zarpazo de la intoleranci, es una obligación de todo ciudadano de bien y de una institución parlamentaria como es el Parlamento Vasco".

VIOLENCIA CALLEJERA

Respecto a la reiterada negativa de EH a condenar la violencia callejera, Atutxa afirmó que "no todo es alcanzabe y mucho menos en dos días", y comparó el deseo que existe de que EH condene la violencia con el que existe por devolver la vida a los asesinados por ETA.

"Es algo imposible, pero me encantaría sin duda alguna devolver la vida a tantas personas inocentes ue han quedado en el camino. Devolver esas lágrimas de tantísimas personas que han llorado a lo largo de estos últimos 30 años en los que hemos tenido que padecer las consecuencias de algo que, nos resultaba a todas luces, incomprensible y fuera de toda capacidad de digestión", declaró.

Añadió que el proceso de paz en Euskadi es largo y "a todos nos apetecerían muchísimas cosas, y una sería el que explícitamente y sonoramente se condenara el ejercicio de cualquier tipo de violencia".

Sin embargo,a juicio de Atutxa, "son así las cosas. No todo es alcanzable y mucho menos en dos días", aunque añadió que se están dando pasos en ese camino.

Respecto a la posible reunión de la Asamblea Kurda en el exilio en las instalaciones del Parlamento Vasco, Atutxa se limitó a señalar que ha sido un asunto "suficientemente debatido y cacareado a través de los medios de comunicación en toda la sociedad y todavía no se ha apagado el eco de esas reacciones". Recordó que la próxima semana se volverá a debatir en l pleno del Parlamento.