Así lo acordaron hoy en una reunión celebrada en Madrid las direcciones de la Confederación Nacional Católica de Padres de Alumnos (CONCAPA) y de la Asociación de Profesores para la Enseñanza de la Religión (APPRECE).

En un comunicado tras el encuentro, la CONCAPA mostró su convencimiento de que el jefe del Ejecutivo no desoirá las reivindicaciones de los más de 2,8 millones de padres que han dado su firma a la campaña que ha desarrollado en los últimos meses en contra de una hipotética desaparición de la clase de Religión del sistema educativo.

Los docentes de Religión representados en APPRECE aventuran que 18.000 enseñantes de esta disciplina desaparecerán si la reforma educativa emprendida por el Gobierno del PSOE da al traste con esta asignatura.

APPRECE destaca que la Constitución Europea reconoce textualmente "el derecho de los padres a garantizar la educación y la enseñanza de sus hijos conforme a sus convicciones religiosas, filosóficas y pedagógicas", y asegura que en la mayor parte de los países europeos se educa a los alumnos en la enseñanza de la Religión, "sin que ello suponga discriminación alguna ni conflicto social".