La resolución del jurado facilitada a los medios de comunicación por un agente judicial dice textualmente: "Mikel Otegi ha sido declarado no culpable del asesinato de dos ertzainas en Itsasondo, por no ser responsable de sus actos".

Ese jurado estuvo compuesto por ocho mujeres y un hombre que durante varios días escucharon los testimonios de los testigos, así como las peticiones de las partes. Asimismo, el jurado acudió, bajo grandes medidas de seguridad, a caserío de Oteizábal, en donde ocurrió el crimen, para realizar una reconstrucción de los hechos.

Durante el juicio, el fiscal pidió para Otegi 55 años de prisión, la acusación particular solicitó 58 años de cárcel, mientras que el abogado defensor del procesado, Miguel Castells, abogó por su absolución, al entender que sufrió un trastorno mental.

Mikel Otegi, militante de Jarrai, estaba acusado de disparar por la espalda y con una escopeta contra los agentes de la Ertzaintza Iñaki Mendiluce y Jsé Luis González, que fallecieron el acto.

La militancia en Jarrai de Mikel Otegi provocó que la izquierda abertzale buscara explicaciones políticas a su actuación y que 19 de los 36 candidatos a jurado preseleccionados el pasado mes de enero presentaran alegaciones para no integrarse en él.