Ortega hizo esta afirmación durante su intervención en la tercera mesa redonda de la mañana, con el título "El Desarrollo Sostenible de Cantabria: Políticas Públicas y Experiencias Empresariales", que, en el marco del Encuentro 2006 de la Economía de Cantabria, organiza hoy en Santander Nueva Economía Fórum con la colaboración de "The Wall Street Journal" y el patrocinio del Grupo Santander.

"El desarrollo sostenible de Cantabria", afirmó, "nos exige a todos un modelo que permita integrar la dimensión ambiental en todas las intervenciones públicas y privadas".

Al respecto, agregó que "ser consciente de lo difícil que es introducir este tipo de comportamiento en nuestras actitudes es la base del desarrollo sostenible" al que, enfatizó, aspira la región que preside Miguel Ángel Revilla.

En su alocución al nutrido grupo de empresarios cántabros que asisten a este encuentro en el santanderino hotel Bahía, Ortega indicó que el desarrollo sostenible en la región "exige una estrategia, a corto, sí, pero también a medio y largo plazo, con políticas dirigidas a invertir esas tendencias" no tan respetuosas con el medio ambiente que han presidido hasta la actualidad el ejercicio de producción industrial.

Reiteró que "invertir esas tendencias supone internalizar los costos ambientales de esas acciones, así como los valores ambientales, como un factor de desarrollo sostenible, incluyendo los ecosistemas y el patrimonio cultural".

Sin embargo, admitió que todo ello es "complejo, puesto que afecta al balance de la economía pública, privada y particular", razón por la que pidió la implicación de todos en esta tarea.

En conclusión, y tras recordar que Cantabria ha sido una de las comunidades autónomas más industrializadas durante los últimos 100 años, fijó como ejes del proceso para hacer posible un adecuado desarrollo sostenible el cumplimiento del compromiso de Kioto, la protección del territorio y el paisaje de acuerdo con las exigencias europeas, y políticas transversales que permitan investigar, formar y transformar en el campo ambiental "desde lo público pero también en colaboración con la iniciativa privada".

El desarrollo sostenible, agregó, "ha de sustentarse en la innovación y la investigación, porque sólo a través del valor añadido que proporciona el capital humano y la innovación podremos construir un modelo de desarrollo sostenible adecuado para Cantabria".

Por su parte, el presidente del Grupo Armando Álvarez, Armando Álvarez, se vanaglorió de que en su empresa "no se ha producido ningún vertido de residuos industriales durante el proceso de producción", cuyo sistema de control y reciclaje explicó con detalle a los asistentes.

En último lugar, Ignacio Casuso, responsable de Distribuición de Enel Viesgo, subrayó el papel de las administraciones públicas en el desarrollo de las infraestructuras eléctricas y, en particular, de que aquél sea sostenible liderando campañas de concienciación para un mejor uso y ahorro de los recursos existentes.