Hirrlinger, que hizo esta declaración en la sesión inaugural de la conferencia "Mercado del trabajo 2000 parapersonas con discapacidad", resaltó la necesidad de un programa europeo específico para minusválidos, ya que la situación de los 40 millones de discapacitados europeos "está muy lejos de ser ni siquiera aceptable".

Durante su intervención, el presidente de la AEH destacó el papel crucial del trabajo en el proceso de socialización de las personas con minusvalías, colectivo que en nuestro continente sufre unas tasas de desempleo muy superiores al resto de la población.

Según Hirrlinger, las altas tsas de desempleo de los discapacitados europeos tienen su origen tanto en causas internas del propio colectivo como en determinadas circunstancias externas que inciden negativamente.

Entre las primeras, el presidente de la AEH señaló la falta de formación y de oportunidades de los minusválidos, algo contra lo que, en su opinión, "hay que luchar con todas las formas a nuestro alcance".

Como causas externas, Hirrlinger hizo referencia a la falta de mentalización de la sociedad, "que sigue creyendo ue los minusválidos no pueden desempeñar un trabajo del mismo modo que el resto de trabajadores", y la falta de puestos de trabajo adecuados para minusválidos, así como las dificultades de desplazamiento y acceso al empleo.

La conferencia "Mercado del trabajo 2000 para personas con discapacidad" reune hasta mañana en Bruselas a más de 200 expertos europeos en materia de integración laboral de discapacitados, que examinarán la situación y las perspectivas laborales de los minusválidos en el nuevo mercao de trabajo que se definirá a partir del año 2000.

El congreso, primero de estas características que se celebra en Europa, cuenta con el patrocinio de la Comisión Europea, la Fundación ONCE y la AEH.