Según informa Orange en un comunicado, en la demanda pide que se condene a Euskaltel a cesar en esa conducta, rectificar las manifestaciones realizadas, publicar a su costa la sentencia que se dicte e indemnizar los daños y perjuicios que sus actuaciones han ocasionado a la marca Orange.

Orange afirma en su demanda que es ilegal que Euskaltel intente mejorar su posición en el mercado por el procedimiento de desacreditar a su competidora.

Además, considera que Euskaltel ha puesto en marcha una campaña de denigración contra ella, dando la mayor publicidad posible a una serie de manifestaciones falsas, con lo que Euskaltel, en último término, intenta animar a los clientes de Orange en el País Vasco a migrar a otra red diferente a la de Orange.

Desde que se inició la controversia entre Orange y Euskaltel en relación con la titularidad de los clientes de la red de Orange en el País Vasco, Euskaltel ha mantenido una actuación contraria a las normas que regulan la competencia en el mercado, según Orange, y ha llegado incluso a atribuirle, agrega, actuaciones ilegales de diversa índole, atribución que es "absolutamente falsa".