Los partidos de la oposición creen, asimsmo, que Manuel Fraga intentará presentar algunos grandes proyectos, como la autovía y los planes de electrificación, telefonía rural y red de gas, como logros propios, pese a que será el Gobierno central quien cargue con el peso de las inversiones.

Para el portavoz del PSOE gallego, Antolín Sánchez Presedo, estos años han servido para comprobar que "Fraga es un político ineficaz y caro, que ha caído en una monumental desviación de fondos hacia cuestiones de imagen".

El PSOE reconoce como único lgro el de reducir drásticamente las cifras de los incendios forestales, algo en lo que coincide el portavoz del Bloque Nacionalista Galego (BNG), Xosé Manuel Beiras.

Xosé Manuel Beiras manifestó a Servimedia que "no vale volver a presentarse con otros doce tomos de promesas bajo el brazo. Los gallegos no comulgan con ruedas de molino y van a pedir un balance".

Por su parte, el portavoz del Partido Socialista Galego-Esquerda Galega, Camilo Nogueira, denunció que "Fraga gastó en mil y una cosas sinimportancia los cuartos de todos y ahora intentará vender promesas para la próxima legislatura".

Sin embargo, fuentes de la Xunta de Galicia rechazaron estas acusaciones y aludieron a las obras realizadas -como las autovías de Salnés o de La Coruña a Carballo-, a la reforma administrativa (todavía no concluida), al plan de vivienda que prevé invertir 20.000 millones de cinco años -todavía no aprobado por el Ejecutivo- y al Plan Económico y Social, que prevé unas inversiones de 791.000 millones de peseas en el período 1993-96.

La Xunta también considera importante el traspaso del Insalud a Galicia, la integración de los hospitales en la red pública autonómica que se está realizando ahora, el convenio con el Ministerio del Interior para la creación de la policía autonómica y el plan forestal a largo plazo, que la oposición critica por entender que abre las puertas a la plantación masiva de eucaliptos.

Otro gran proyecto que es centro de polémica es el Plan Xacobeo 93, con numerosas realizacione en el Camino de Santiago que han merecido las críticas de colectivos de arquitectos por considerarlas un atentado contra el patrimonio histórico.