La ONCE niega "con absoluta rotundidad" haber adquirido tales facturas y considera que se hace "un daño irreparable" a la institución "con acusaciones tan faltas de rigor en una operación de la que es totalmente ajena", según cita el escrito textualmente.

La nota termina recordando que el pasado 26 de noviembre, la organización "aclaró" la compra de un nmueble en el número 1 de la calle Quevedo, de Madrid, "adquirido a sus legítimos propietarios", cuando surgieron los primeros rumores sobre una posible implicación en el fraude del IVA .

La nota añade que la ONCE remitió toda la documentación correspondiente al Juzgado de Delitos Monetarios de la Audiencia Nacional "como prueba de su buena voluntad para colaborar con la Justicia".

En aquela ocasión, la organización reconoció haber comprado por 169 millones de pesetas el edificio a Carlos Juan Vila (uno de los encarcelados en relación con el fraude fiscal), el mismo día que éste lo había adquirido por 55 millones.

La ONCE especificó que el pago se efectuó "con dinero perfectamente contabilizado" en cheques al portador y subrayó que la compra se efectuó con la aprobación de la comisión de inversiones del Consejo del Protectorado de la organización.