Esta patología puede causar traumas psicológicos que duran años en las mujeres que logran sobrevivir a ella. “Las hemorragias graves durante el parto son una de las causas más comunes de mortalidad materna, pero son altamente prevenibles y tratables”, explicó el doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS. Añadió que este nuevo plan mundial "traza un camino hacia un mundo en el que más mujeres tengan un parto seguro y un futuro saludable con sus familias".

Elaborada por más de 130 expertos, la nueva hoja de ruta "tiene como objetivo ayudar a los países a abordar las marcadas diferencias en los resultados de supervivencia de tras una hemorragia posparto, que reflejan importantes desigualdades en el acceso a los servicios de salud esenciales". Su aplicación se desarrollará con el apoyo de un “comité directivo interdisciplinar”.

Según la OMS, más del 85% de las muertes por hemorragia posparto ocurren en África subsahariana y Asia meridional. Los factores de riesgo incluyen anemia, anomalías placentarias y otras complicaciones en el embarazo, como infecciones y preeclampsia o tensión alta durante el embarazo.

ATENCIÓN PRENATAL DE CALIDAD

Muchos factores de riesgo de la hemorragia posparto pueden reducirse “si existe una atención prenatal de calidad”, lo que incluye la asistencia sanitaria, incluido el acceso a la ecografía, junto con un seguimiento eficaz en las horas posteriores al nacimiento. Si comienza la hemorragia, también debe detectarse y tratarse con extrema rapidez.

“Sin embargo, con demasiada frecuencia, los centros de salud carecen de los trabajadores sanitarios o de los recursos necesarios, incluidos los productos que salvan vidas, como la oxitocina, el ácido tranexámico o la sangre para transfusiones”, lamentó la entidad.

Por ello, ‘La hoja de ruta para combatir la hemorragia posparto entre 2023 y 2030’ establece orientaciones nuevas y más amplias para la hemorragia posparto que abarquen la prevención, la detección y el tratamiento. También aboga por la investigación para incorporar innovaciones terapéuticas y adquirir medicamentos y productos de alta calidad. Además, se incluye promoción y la sensibilización de los países para que acometan todas estas mejoras.

“Para hacer frente a la hemorragia posparto se necesita un enfoque múltiple centrado tanto en la prevención como en la respuesta, es decir, en la prevención de los factores de riesgo y en el acceso inmediato a los tratamientos cuando sea necesario, junto con esfuerzos más amplios para fortalecer los derechos de las mujeres”, subrayó la doctora Pascale Allotey, directora de Salud Sexual y Reproductiva de la OMS.

Añadió que "toda mujer, sin importar dónde viva, debe tener acceso a una atención de maternidad oportuna y de alta calidad, con trabajadores de la salud capacitados, equipos esenciales y estanterías abastecidas con productos apropiados y eficaces, lo que es crucial para tratar la hemorragia posparto y reducir las muertes maternas".

Por último, la OMS estima que una mujer muere cada dos minutos por causas relacionadas con el embarazo o el parto y destaca que desde 2015 se ha avanzado poco en la reducción de estas muertes, por lo que "el mundo no está bien encaminado para alcanzar las metas relacionadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible".