Según un comunicado de prensa de la OMS,el gran aumento de diferentes índices de protección contra los rayos ultravioletas crea "confusión en el público". Además, algunos fabricantes de cremas solares no se atienen al "índice universal de rayos ultravioleta" acordado por las organizaciones internacionales en 1995.

La escala o índices de protección, que va de cero a veinte en verano en los países cercanos al ecuador, se realiza conforme a las lesiones que se producen en los ojos y en la piel cuanto más aumenta el tiempo de exposición a los ryos ultravioletas.

Las cremas deben atenerse a estos índices y proteger al bañista de la exposición a la que están sometidos en cada momento. En Europa, durante el verano, se alcanza un máximo de ocho en la escala, aunque en la playa se puede llegar a una mayor gradación.

Una exposición excesiva puede provocar varios tipos de cáncer, aceleración del envejecimiento de la piel, cataratas y otros problemas oculares, e incluso, debilidad ante las enfermedades infecciosas y reducción de la eficacia delas vacunas.