La OIT destacó que las disposiciones sobre trabajo y empleo incluidas en la nueva Convención sobre los derechos de las personas con discapacidad producirá un cambio importante y podrán beneficiar a unos 479 millones de personas en edad de trabajar que son discapacitadas.

A juicio de la OIT, la Convención contiene elementos relevantes, como la prohibición de discriminar por discapacidad en todo tipo de empleo, y la llamada de atención a todos los Estados para generar oportunidades laborales formales para los discapacitados que quieren trabajar.

Para facilitar este proceso, la convención promueve el acceso de las personas discapacitadas a empleos escogidos libremente, a programas de orientación vocacional y capacitación, a servicios de contratación y a planes para la formación continua. Además, se busca favorecerlos con mejoras en la accesibilidad a lugares de trabajo, al transporte y a la información escrita y electrónica.

La nueva Convención de la ONU estará disponible para su firma y ratificación el 30 de marzo de 2007. Cuando entre en efecto, un mes después de que haya sido ratificada por 20 países, los trabajadores discapacitados podrán ejercer sus derechos laborales y sindicales al igual que los demás, y la discriminación por razones de discapacidad quedará prohibida en todo tipo de empleos.