El estudio, realizado en colaboración con la Asociación Multisectorial de Empresas Españolas de Electrónica y Comunicaciones, concluye que para hacer llegar estas tecnologías a la tercera edad "es necesario vender servicios, no tecnología, transmitiendo en todo momento al usuario sus beneficios".

Los datos recogidos en este informe desvelan que la clave para que las tecnologías del hogar digital penetren en las casas de nuestros mayores está en ofrecerles servicios atractivos con una funcionalidad conocida y que sean capaces de despertar su interés, no en destacar las novedades técnicas de estos dispositivos.

También queda patente en el informe que las necesidades reales más demandadas por las personas mayores son las de seguridad, movilidad y confort; asistenciales y de salud; así como de ocio y entretenimiento.

De igual modo, los datos reflejan la falta de predisposición de este colectivo a utilizar este tipo de tecnologías, por lo que "sería fundamental" que las personas mayores perciban esta solución como una opción que les permita continuar resiendo en sus domicilios y contar con sus necesidades específicas cubiertas.

Además, los investigadores, recomiendan que estas soluciones sean lo sufientemente fáciles como para que "estas personas se animen a aprenderlas y uitlizarlas".

El estudio también revela que aunque las tecnologías del "hogar digital" están maduras, "el mercado todavía no ha despegado". Según se explica en el informe, esto se debe "en gran medida" a las incopatibilidades de sistemas y dispositivos, que han llevado a ralentizar "el esperado descenso de precios".