Al tiempo que recuerda a los consumidores los riesgos de la automedicación, la OCU advierte a la población sobre los posibles riesgos de un medicamento que recientemente ha sido retirado en Francia.

El Glifanan, así como los medicamentos con glafenina, fueron prohibidos con antelación en Holanda y Bélgica, a partir de unos estudios que demostraban sus negativos efetos secundarios.

Según la organización de consumidores, este analgésico suprime el dolor, aunque no tiene ninguna acción contra la fiebre o como antiinflamatorio. Sin embargo, agrega que no se trata de un medicamento anodino, ya que se han descrito afecciones renales y hepáticas a dosis superiores a la terapéutica.

Además, puede provocar reacciones alérgicas que van desde una simple erupción, en los casos más leves, hasta la muerte por choque anafiláctico, en los más graves.

La OCU ha denuncado también la existencia de otros medicamentos, actualmente en el mercado, que contienen glafenina en su composición y la facilidad de hacerse con ellos, pese a que deben venderse "con receta".