La OCU considera que la subida de los carburantes y las medidas pactadas por el Gobierno con transportistas, agricultores y pescadores perjudican a los consumidores por un doble motivo. "Porque vamos a tener que pagar los 120.000 millones de rebaja fiscal que han conseguido y porque vamos a tener que pagar el porcentaje de incremento que han conseguido en el transporte (tarifas un 10% más caras)", manifestó a Servimedia el director de la asociación, José María Múgica.

Añadió que seguamente habrá aumentado el porcentaje de familias españolas que no pueden ahorrar una peseta, que según datos del Instituto Nacional de Estadística correspondientes al segundo trimestre del año era el 61,5%.

La OCU criticó que el Ejecutivo haya decidido aumentar el precio de la bombona de butano, pese que la usan las familias con menores ingresos y su distribución se encuentra prácticamente monopolizada.

Múgica propuso como "una solución" para los consumidores que en el IRPF se incremente el denomnado "mínimo vital", es decir, la parte de los ingresos que está exenta de impuestos.

Asimismo, criticó que Hacienda no haya actualizado respecto al IPC la escala de gravamen del IRPF de los dos últimos años, lo que equivale a aumentar la presión fiscal en la misma medida que han subido los precios en ese periodo.