La OCU se congratuló del "éxito de la acción policial" que ha llevado a la detención de los máximos responsables la red, a cuyas empresas ya denunció la organización de consumidores el pasado 19 de noviembre, ante la posibilidad de que encubrieran casos de prostitución de menores.

En opinión de la organización, el problema del acceso a las líneas "no se va a solucinar con la limitación a un horario determinado" ni con la denominación de "eróticas", y va a seguir ofreciendo "inmensas posibilidades a la hora de incidir sobre los menores".

Por otra parte, la OCU y la FEACCU afirmaron que esperan recoger, a corto plazo, medio millón de firmas, para que la Administración y Telefónica "dejen de hacer oidos sordos al clamor social" y obliguen a la firma de un contrato independiente para acceder a las líneas "903".