La OCU puso de manifiesto su preocupación tras analizar las condiciones de las instalaciones y la calidad del agua de las piscinas de 25 ciudades españolas.

El estudio se llevó a cabo el pasado mes de julio de 2004 en 49 instalaciones de 25 ciudades españolas. La OCU resaltó que en torno al 40% de las piscinas analizadas no contaba, en el momento en el que se realizó el estudio, "con agua de baño de suficiente calidad".

En líneas generales, el informe de la OCU destacó que las piscinas infantiles son las que presentan mayores problemas, ya que acogen a un gran número de niños que "a menudo no respetan las medidas de higiene básicas". No obstante, éstas no son las únicas instalaciones con ese problema, ya que también se encontró "agua contaminada" en varias piscinas de adultos.

Tras valorar aspectos como la higiene y calidad del agua, la presencia de socorristas y salvavidas, la existencia de botiquín e informaciones básicas o la higiene de las instalaciones; los técnicos de la OCU concluyeron con que, en muchas ocasiones, los bañistas disfrutan de aguas que no "reúnen las mínimas condiciones sanitarias" y señalaron que "es tarea de todos los implicados" conseguir que una psicina "no sea una diversión insegura o antihigiénica".