LA OCDE PIDE A ESPAÑA UN RECORTE DE LO GASTOS SOCIALES, DESPIDOS MAS BARATOS Y UNA MAYOR LIBERALIZACION DE LOS MERCADOS

- Prevé que la economía española crecerá un 3,7% este año y un 3,5% en el 2001

MADRID
SERVIMEDIA

La OCDE, la organización de países industrializados, reconoce en su último informe sobre España que la evolución de la economía está siendo "magnífica", pero pide que se tomen medidas para garantizar esta evolución, como el recorte de los gastos sociales, una nueva reforma laboral (que incluya el abaratamento del despido) y una mayor liberalización de los mercados.

Aunque aplaude los planes del Gobierno para seguir avanzando en la reducción del déficit público en los próximos años, la organización advierte de que los posibles ahorros que realiza el Estado pueden perderse por las inversiones en infraestructuras y el aumento de los derechos adquiridos por pensiones y atención sanitaria, debido al envejecimiento de la población.

"Se necesitan programas más ambiciosos de recorte de gastos", dice el iforme, que reconoce que el sistema de pensiones es equilibrado desde el año pasado, situación que se mantendrá durante los próximos años. "Sin embargo, la persistente maduración del sistema y su generosidad intrínseca contribuirán a generar presiones presupuestarias en el futuro", señala.

La OCDE insiste en la idea de la generosidad de estas prestaciones: "Teniendo en cuenta el aumento previsto de la tasa de dependencia de las personas mayores, las pensiones son generosas, tanto respecto a las cotizacones como a estándares internacionales", añade.

La organización reconoce que la creación de un fondo de reserva atenuará la severidad de las medidas que se tendrán que tomar más adelante, pero insiste en que la renegociación del Pacto de Toledo "debería replantear la generosidad del sistema, ya que el aumento de las cotizaciones podría perjudicar el empleo".

Concretamente, demanda una ampliación de las bases de cotización y el endurecimiento de las condiciones para acceder a estas prestaciones. Tmbién se preocupa por los "fuertes incentivos" a la jubilación anticipada, y sugiere que se eviten incrementos en las pensiones mínimas no contributivas para contrarrestar este factor.

REFORMA LABORAL

La OCDE reconoce que la reforma laboral de 1997 tuvo efectos positivos, pero subraya que el empleo temporal todavía es muy elevado y que persisten contratos con diferentes tipos de incentivos, lo que puede perpetuar la segmentación del mercado laboral.

No obstante, asegura que el importe de las inemnizaciones por despido "actualmente son elevadas" y, además, en determinadas circunstancias están exentas de impuestos, por lo que sugiere que se introduzcan medidas que modifiquen esta situación.

A su juicio, deberían tomarse medidas para "suavizar" la protección al desempleo, de forma que se preserve el alto ritmo de creación de empleo y se mejore la asignación de recursos humanos. También solicita que se refuercen las políticas activas para facilitar la búsqueda de un puesto de trabajo.

La lgislación sobre despidos improcedentes debería clarificarse, para garantizar que las sentencias adapten la cuantía de las indemnizaciones al espíritu de la nueva ley. Asimismo, el sistema de negociación colectiva sigue siendo bastante rígido, por lo que debería introducirse una flexibilización que atienda mejor la situación de cada empresa.

La nueva reforma del mercado laboral debería impulsar la movilidad geográfica, cuya ausencia contribuye a mantener las grandes diferencias de paro entre las distinas comunidades autónomas. Otra medida complementaria sería fomentar el mercado de alquiler de viviendas y moderar el tratamiento fiscal favorable a la adquisición de las mismas.

La organización también cree conveniente un endurecimiento de las condiciones para que los trabajadores agrarios accedan al subsidio, que califica de "poco exigentes". Pide una nueva regulación del contrato a tiempo parcial que sea más flexible.

Respecto a la liberalización de los mercados, solicita mayor competencia en ls telecomunicaciones, para mejorar la calidad del servicio y abaratar su coste. Recuerda que el sector eléctrico sigue estando muy concentrado y que sus precios están entre los más altos de la OCDE, por lo que es necesario introducir nuevos operadores.

Otras medidas suplementarias serían el reforzamiento de las competencias de la Comisión de la Energía y que la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones asuma la potestad de regular los precios del sector. Recomienda también que se acelere la liberlización del mercado del gas y unos horarios comerciales más flexibles.

La organización internacional opina que las empresas de servicios públicos reciben demasiadas subvenciones, sobre todo las dedicadas al transporte ferroviario y urbano. Demanda que aumenten sus ingresos de explotación y que se reduzcan sus costes operativos, a la vez que aconseja que se ceda a empresas concesionarias parte de estas actividades.

Respecto a RTVE, recalca que su deuda sigue aumentando significativamente, por lo ue plantea que mejoren sus ingresos mediante el establecimiento de un canon a los usuarios, si se opta por mantener el carácter público de la prestación.

En relación con el sistema de financiación de las comunidades autónomas, la OCDE afirma que su participación en los ingresos fiscales debería apoyarse en un espectro de impuestos más amplio, especialmente de aquéllos que tengan unos rendimientos "menos volátiles" que el IRPF. También pide que las comunidades y los ayuntamientos creen tasas para el pao de los servicios.

PERSPECTIVAS

La OCDE respalda los resultados de la actual política económica en España, puesto que hemos disfrutado de tres años de fuerte crecimiento económico a la vez que se ha creado empleo y se ha reducido el déficit público y la inflación.

Estas buenas perspectivas se mantendrán en los dos años siguientes, de forma que el PIB crecerá un 3,7% en el 2000 y un 3,5% en el 2001. No obstante, recomienda una política presupuestaria más restrictiva para garantizar esta evolucin y evitar los riesgos de recalentamiento.

La demanda interna seguirá siendo uno de los motores de la economía, pero con menos vigor que en estos últimos años. En cambio, el sector exterior tomará el relevo gracias a la reactivación de las exportaciones, animadas por el buen entorno internacional.

(SERVIMEDIA)
03 Feb 2000
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