Esta es la contundente valoración formulada en un análisis sobre "Privatización: tendencias recientes", publicado en el último número de la publicación oficial de la OCDE "Financial Trends", correspondiente al mes de junio, a la que tuvo acceso Servimedia. El informe señala que, "en general, la cuota de emisiones de acciones relacionadas con operaciones privatizadoras tiende a crecer en mercados de valores que experimentan un 'boom', mientras que los mercados de valores declinantes o volátiles tienen un impacto negativo sobre las privatizaciones".

"La privatización de Tabacalera es un ejemplo; los suscriptores que participaron en esta particular operación realmente incurrieron en pérdidas, un suceso que ocurre por primera vez en una oferta privatizadra en la OCDE".

Lo que ocurrió con la privatización de Tabacalera es que la especulación previa a la Oferta Pública de Venta encareció el precio de las acciones hasta tal punto que su propio presidente, César Alierta, tuvo que advertir que no se ajustaba a los fundamentos.

Tras la oferta, el valor acusó su sobrevaloración artificial y perdió durante varias semanas el precio de la colocación (3.183 pesetas para los minoristas), aunque la posterior especulación sobre una subida del precio del tabac permitió recuperar parte del terreno perdido.

El portavoz de Economía del Partido Popular en el Congreso, Ramón Aguirre, comentó a Servimedia, en relación con las apreciaciones de los expertos de la OCDE, que el valor de Tabacalera pudo sufrir un episodio especulativo pasajero, pero insistió en que los títulos de esa compañía no son precisamente de los que van a hacer perder dinero a los accionistas.

Por otra parte, el informe de la OCDE realiza un análisis comparativo de las privatizaciones efetuadas en todos los países desarrollados durante 1997 y sitúa a España como el tercero en que estas operaciones generaron más ingresos, con 12.450 millones de dólares.

Por delante se situaron Australia, con 16.804 millones de dólares e Italia, con 26.750 millones. En el conjunto de la OCDE, los ingresos recaudados por los gobiernos se elevaron a 98.446 millones de dólares.