Almunia señaló que su grupo quiere "esperar a ver qué medidas toman, qué ideas sugieren, qué estrategia adoptan y cómo gestionan los problemas quienes los han creado".

El portavoz socialista explicó que el número de objetores de conciencia se ha vuelto a disparar a raíz del cambio de modelo de FFAA por parte del Gobierno y la objeción de conciencia está entrando en una situación de difícil control, "quese ha venido a agravar con la toma en consideración, con el apoyo entusiasta del Grupo Popular, de la iniciativa de CiU, que aun defendiendo un modelo de Ejército profesional trata además de complicar la gestión de la objeción de conciencia".

Almunia recordó que en aquella toma en consideración los socialistas dijeron que apoyaban algunos aspectos del texto, pero que con otros no se podían identificar porque hasta que no entre en vigor el Ejército profesional el modelo actual debe ir acompañado, por ua parte, de un servicio militar obligatorio y, por otra, de una objeción de conciencia que sea posible gestionar.

El portavoz socialista criticó que "los grupos que componen la mayoría parlamentaria parecen estar al margen de todo este tipo de preocupaciones, parecen comportarse como si lo del Ejército profesional fuese coser y cantar y que no hace falta más que pactarlo en una reunión entre dos grupos políticos para que eso ya se ponga en marcha automáticamente, y además parece no importarles en absouto la duración de la transición y los problemas que surgen en el momento en que se inicia la transición hacia el modelo de Ejército profesional".

"Estamos asombrados de tanta irresponsabilidad, de tanta imprevisión y de tanta frivolidad al tratar un tema tan importante como el de las Fuerzas Armadas y el de la defensa de la seguridad de nuestro país y de todos sus ciudadanos", concluyó.