LOS OBISPOS SE PRONUNCIAN CONTRA LAINSUMISION

- Creen que se puede servir a la sociedad dedicando "un tiempo de la vida al Ejército y a la preparación militar"

MADRID
SERVIMEDIA

Los obispos consideran que la desobediencia civil no está justificada en el caso de la insumisión al servicio militar y creen que se puede servir "noblemente a la sociedad dedicando un tiempo de la vida al Ejército y a la preparación militar".

En una nota aprobada en la última reunión de la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopl, que hoy fue enviada a todos los obispos tras incorporar algunas observaciones, éstos aseguran que no es lícito intentar conseguir los objetivos que persiguen los insumisos mediante el quebrantamiento deliberado, "y frecuentemente programado", de la legislación de un Estado de derecho.

Por el contrario, se muestran partidarios de conseguir estos objetivos a través de los cauces legales disponibles o alcanzables en un ordenamiento democrático.

"Es muy difícil", argumentan los obispos, "probar qu las leyes que ahora imposibilitan o dificultan su realización estén violando tan directa y evidentemente los derechos fundamentales de las personas y atentando de tal manera contra el bien común que la trasgresión consciente y sistemática de ellas sea el modo adecuado de promover su cambio. Por eso, nos parece que, en este caso, la desobediencia civil no está justificada".

Asimismo, recuerdan que la insumisión no es una exigencia del Evangelio ni la forma consecuente de la objeción de conciencia al srvicio militar, tal y como ésta es entendida por la doctrina de la Iglesia.

LA INSTITUCION MILITAR

Por ello, la Conferencia Episcopal denuncia cualquier intento de sugerir a los jóvenes o a las instituciones de la Iglesia "que sin ser insumisos o sin colaborar con la insumisión no pueden ser verdaderamente cristianos".

"No es exacto afirmar o insinuar", agrega, "que la causa principal de la violencia y de las guerras se halle en la existencia de las instituciones militares".

La Iglesia catlica mantiene que las causas últimas de la violencia hay que buscarlas en las tendencias "egoístas y agresivas" del ser humano, así como en los graves desórdenes e injusticias que se dan en las relaciones entre los pueblos.

Los obispos muestran su temor ante la posibilidd de que surja un cierto radicalismo religioso que por no tener en cuenta estos principios llegue a ser, dicen, un peligro para la paz.

Sin embargo, los prelados reconocen "lo que de bueno puede haber en la actitud de los insumiso" cuando su actitud es sincera, ya que recuerdan a ciudadanos y gobernantes que están obligados a empeñarse en evitar las guerras.

(SERVIMEDIA)
04 Oct 1995
GJA