Los obispos han invitado a los católicos "a la plegaria individual y comunitaria para que el Creador providente envíe lluvias y se moderen las temperaturas; para que consuele a los que sufre a causa de pérdidas materiales o de la muerte de seres queridos y otorgue el descanso eterno a los difuntos", afirma la Conferencia Episcopal.

"La oración ha de avivar en nosotros la responsabilidad y la solidaridad y alentar a quienes trabajan por prevenir y paliar los males. Quienes actúan de modo inadecuado o incluso criminal en circunstancias tan graves, responderán ante Dios sobre su conducta", concluyen los obispos.