NUÑEZ MORGADES DICE QUE LA LEY ANTIBOTELLON ES "MUY DIFICIL DE APLICAR" Y QUE SUS EFECTOS SE VERAN POCO A POCO
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El Defensor de Menor de la Comunidad de Madrid, Pedro Núñez Morgades, aseguró hoy que la Ley sobre Drogodependencias y otros Trastornos Adictivos, conocida popularmente como "ley antibotellón", es "my difícil de aplicar" y que sus efectos se verán "poco a poco", para lo que pidió la implicación de toda la sociedad.
Morgades, después de participar en un seminario de los cursos de verano de San Lorenzo de El Escorial, señaló que tanto las administraciones como la sociedad "tienen que luchar contra un espectro", ya que "no hay conciencia de que el alcohol es una droga".
Según dijo, parte de la dificultad de su aplicación proviene del hecho de que los jóvenes "todo lo que sea prohibición lo ven omo invitación a hacer una actividad", aunque les animó a darse cuenta de que "mirando los datos de la agencias especializadas" está claro que hay un consumo abusivo de alcohol por su parte.
"Vivimos en una sociedad inmersa en la cultura del alcohol y, por tanto, la ley tiene que luchar contra muchos inconvenientes, y principalmente necesita el apoyo de la juventud, que entienda que hay un problema", comentó.
Morgades reconoció que, a su juicio, quizás la nueva ley no "se ha vendido bien", ya que según comentó, la nueva norma "tiene muchas posibilidades, de atención a los drogodependientes, labor preventiva, informativa y ayudas a los Ayuntamientos a encontrar vías de contención del fenómeno".
Recalcó que es necesario apoyar la nueva norma, "no sólo en la fase de sanción, sino en todas las demás, como son de información, prevención y búsqueda de alternativas".
Admitió que "la ley es una realidad que hubiera sido deseable que hubiera tenido el consenso total, porque cada uno tenemos la poibilidad de actuar sobre sectores amplios y entonces el consenso hubiera dado muchas más posibilidades de aplicación".
Finalmente, Morgades abogó por volver a los "hábitos saludables de ocio, volver a la cultura del día, de conectar con la naturaleza, compatibles con la de la noche, donde no debe centrarse todo", y de trabajar en la labor preventiva en los menores de 13 años, edad en la que se empieza a beber, "para llevarles a la reflexión de que el alcohol es una droga, que se van a enfrentar a un mndo en el que la oferta de las distintas drogas va a ser continua, y prepararlos para que las rechacen".
"Las 12.000 personas que mueren al año en España por problemas de alcohol, los 154.000 enfermos que se incorporan como tales por problemas de alcohol, los 600.000 millones que se gastan a las enfermedades producidas por el alcohol, tienen que hacernos reflexionar y no hacernos caer en campañas publicitarias que eluden pronunciar y convencer de la realidad", concluyó.
(SERVIMEDIA)
05 Ago 2002
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