El supervisor explica que esta evolución de la actividad tasadora está ligada a la evolución del mercado inmobiliario y a la financiación hipotecaria.

Los datos muestran que el importe de las valoraciones realizadas por estas sociedades experimentó un retroceso del 19% el año pasado.

Esta caída de las tasaciones efectuadas se concentró en las principales tipologías: edificios de uso residencial (-43%) y viviendas individuales (-34%).

El valor medio tasado por vivienda fue de 228.500 euros, inferior al registrado en 2007 en un 1,8%. Esto es resultado de un incremento de la superficie media tasada del 4%, hasta alcanzar los 98,5 metros cuadrados, y de un descenso del precio medio por metro cuadrado del 5,7%, que se situó en 2.319 euros.

Mientras, las viviendas unifamiliares y adosadas con más del doble de superficie que los pisos, fueron tasadas en un valor medio del metro cuadrado inferior en un 28% al de estos (1.668 euros y 2.319 euros, respectivamente). Así, el valor medio del piso tasado ascendió a 228.500 euros, y alcanzó los 348.800 euros en el caso de las viviendas unifamiliares.

La valoración de suelo urbano se redujo en relación con la del año anterior un 6,4% en lo relativo al número de tasaciones, pero se incrementó algo más del 20% tanto e la superficie como en el importe tasado.

Por su parte, las valoraciones de los edificios destinados a oficinas disminuyeron con mayor intensidad en número (-6,9%) que en importe (-1,1%), como consecuencia de un descenso de valor del metro cuadrado en promedio del 6% y la elevación de su superficie en el 13%.

Por su parte, las tasaciones no inmobiliarias continuaron aumentando por tercer año consecutivo (+44%), pero registraron un retroceso importante en cuanto al importe (-67%).

"Tras el fuerte crecimiento de actividad de años anteriores, las tasadoras empezaron a experimentar síntomas de desaceleración en 2006 y registraron un retroceso en su actividad a partir del año 2007, retroceso que se agudizó en 2008", explica el Banco de España.

Así, en los cuatro últimos años, la actividad del sector ha caído casi un 40% respecto al número de valoraciones realizadas y un 36% en lo relativo a la superficie tasada, habiendo retrocedido un 8% el importe de los bienes tasados.