En un comunicado, este grupo vaticinó que los datos de los años 2004 y 2005 "serán aun mayores, debido a las obras de la M-30 y al incremento de la circulación".

El aumento de personas con patologías respiratorias es muy superior al incremento poblacional, lo que hace que el índice de estos enfermos por 1.000 habitantes haya pasado de un 9,5 en el año 2000, a un 10 en el año 2003, explican los Verdes.

Por este motivo, estos ecologistas exigen "medidas inmediatas por parte de las autoridades municipales y regionales que disminuyan los altos índices de contaminación atmosférica que soportan los madrileños".

Estas medidas, continúan, deben dirigirse fundamentalmente al transporte por carretera, que supone el 55% de las emisiones de óxidos de nitrógeno, que aumentan la concentración de ozono en la atmósfera, lo que genera irritación del tejido pulmonar, disminución de la capacidad respiratoria y menor resistencia a las actividades pulmonares.

Los Verdes recuerdan asimismo que la reducción de la capacidad pulmonar afecta a la circulación de la sangre, lo que puede inducir riesgos de enfermedades cardiovasculares y añaden que el número de personas afectadas por estas enfermedades se ha incrementado en un 16,4% entre el año 1999 y el 2003.