Martínez Camino hizo esta afirmación e su presentación pública a los periodistas. "Necesitamos claridad y buen hacer profesional y en estos aspectos nosotros podemos mejorar y los medios (de comunicación) también pueden mejorar", afirmó.

"Tenemos que ayudarnos mutuamente, porque los lectores y la opinión pública, a quien beneficia nuestro trabajo, tiene derecho a pedirnos algo bien hecho", subrayó.

En este sentido, Martínez Camino se puso a disposición de los periodistas "para que, realmente, la opinión pública española y también la pinión de la Iglesia, sepan lo que realmente sucede en esta casa (CEE) y lo que la Iglesia quiere transmitir".

Explicó que partimos del supuesto de que la posición de la Iglesia no es siempre compartida en una sociedad pluralista como la española, y añadió que "lo que tenemos que conseguir entre todos es que los destinatarios de la comunicación perciban con claridez y nitidez la voz de la Iglesia católica por sí mismos y puedan juzgar, que no llegue demasiado tamizada ni demasiado filtrada, ni por nostros ni por los medios".

Por otro lado, Martínez Camino agradeció a los obispos la confianza que le han depositado con este nombramiento, que, según dijo, le ha "gratamente sorprendido".

"Estoy con ganas de trabajar y de responder a la confianza que los señores obispos han puesto en mí para este cargo, que no es de brillo, que es un cargo de servicio", recalcó.

Finalmente, Martínez Camino destacó que es jesuita y no está exclaustrado, disculpando a aquellos medios de comunicación que informaon hoy de lo contrario.