NUEVO GOBIERNO. BELLOCH ABOGA POR REEXAMINAR EL CODIGO PENAL ANTES DE APROBARLO Y APUESTA POR UN GRAN PACTO EN MATERIA JUDICIAL
- Es partidario de una ley de plazos para el aborto
- Se opone a que los delitos de expresión sean juzgados por lo penal
- Considera que hay que mantener el sistema de designación parlamentaria de los vocales del Consejo General del Poder Judicial
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El nuevo ministro de Justicia, Juan Alberto Belloch, abogó hoy por reexaminar el proyecto de Código Penal durante un plazo de 3 o 4 meses antes de remitirlo a las Cortes para su aprobación e introducir así algunas modificaciones en determinados aspectos, teniendo en cuenta la opinión del Consejo General del Poder Judicial y de otros sectores de la vida judicial.
Entre otras cuestiones, se mstró partidario de que en el caso del aborto, la decisión final la adopte la mujer, estableciendo para ello un sistema mixto de plazos. Este consistiría en que dentro de un determinado período inicial no sea necesario más requisito que la firme voluntad de la mujer de abortar, mientras que pasado ese plazo inicial, sean requeridas otras condiciones.
Asimismo, rechazó el delito de difamación que pretendía introducir el proyecto de Código Penal diciendo que cree "sobre todo en el autocontrol y no en el eterocontrol", y afirmó que, en su opinión, en este caso debe primar la vía civil sobre la penal.
Belloch hizo estas declaraciones durante la primera rueda de prensa que ofreció tras ocupar su despacho en el Ministerio de Justicia, y que comenzó excusándose ante los informadores por haber comparecido con 10 minutos de retraso sobre la hora prevista debido a un fallo de coordinación con sus colaboradores.
Unas de sus primeras palabras tras su toma de posesión fue dejar claro que no iba a pronunciase sobre temas concretos de su departamento ya que todavía "yo no me sé esta asignatura", aunque afirmó que respondería sobre las ideas generales "que vengo sosteniendo desde hace años" y que, a su juicio, "ha determinado que se me encargue este trabajo".
Belloch, que en todo momento resaltó que el ministro debe ser el gestor de unas decisiones adoptadas por el Consejo General del Poder Judicial, el Consejo de Ministros y el Parlamento, indicó que la "médula" de su trabajo en el departamento será "la articipación" y el "consenso".
Para ello, anunció que su pretensión es lograr un pacto social y de Estado en materia de Justicia en el que no sólo participen los jueces, sino también abogados, agentes judiciales y notarios. "Mi propósito es tratar de ilusionar a todos los profesionales, convenciéndoles que ha tocado realmente la hora del segundo cambio", agregó.
Anunció, asimismo, que una de las prioridades de su departamento será la realización de la reforma procesal, pedida, según dijo, por la ayoría de jueces, abogados y todos los que trabajan en este ámbito.
Otro de sus primeros objetivos serán, asimismo, una ampliación de las competencias del Consejo General del Poder Judicial, así como la implantación del jurado, aspecto que, según dijo, "es una obligación constitucional que no deber ser aplazada más".
Esa implantación deberá hacerse, según Belloch, de forma gradual con el fin de garantizar el éxito de la institución y que su puesta en marcha no implique mayores restrasos de la Jusicia, y señaló que el jurado debería ser competente para juzgar a periodistas, jueces y funcionarios públicos.
El ministro de Justicia también expresó su conformidad a que la elección de los vocales del Consejo General del Poder Judicial sea efectuada mediante designación parlamentaria, rechazando así el "sistema de cuotas".
No obstante, precisó que deberían ser introducidas algunas "correcciones" a la designación parlamentaria: que puedan ser propuestos candidatos por otras vías extraparlamentaros y que las comisiones correspondientes del Congreso y del Senado puedan "examinar" a los candidatos a vocales.
Con el fin de obtener la participación de todos los agentes en estos objetivos, Belloch anunció su intención de crear mesas de participación (comisiones) para cada uno de esos temas y de forma inmediata para emprender la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial.
Belloch también se pronunció sobre la reinserción, diciendo que es uno de los fines constitucionales de las penas al queno hay que reunciar, aunque señaló que del terrorismo "mejor no hablar". Además, volvió a mostrarse contrario a la "Ley Corcuera", pero precisó que hay que esperar a que resuelva el Tribunal Constitucional.
Finalmente, tras afirmar que al único principio al que no va a renunciar es "a mi firme convicción de que hay que defender los derechos humanos por encima de cualquier consideración", dijo que lo primero que va a hacer cuando acceda a su nuevo despacho "es tratar de averiguar cómo funcionan los telfonos".
(SERVIMEDIA)
14 Jul 1993
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