La preentación de esta propuesta, que iba incluída en el punto 249, de los 295 que constaba el orden del día, fue precedida en días anteriores por un polémico debate, ya que, según el PSOE e IU, con la aprobación de este préstamo el endeudamiento del Ayuntamiento ascenderá a finales de este año a 107.000 millones de pesetas, récord histórico, en opinión de la oposición.

El responsable del área de Hacienda y Economía, Fernando López Amor, indicó que el préstamo, que costará 5 pesetas diarias a los madrileños servirá para que la corporación financie inversiones que son necesarias, sobre todo ante la fecha de 1992, y aseguró que no significará una subida de impuestos.

"Intentamos recuperar el tiempo perdido por la inercia del equipo de gobierno socialista, lo que lleva este año a un esfuerzo inversor por el que, de cada peseta invertida cuando el PSOE, se invertirán 5", indicó.

López Amor acusó al concejal socialista Alfredo Tejero, quien había asegurado que el préstamo era un "genocidio municipal", e provocar con sus afirmaciones la confusión en los medios financieros. "Hay que ejercer la crítica desde la responsabilidad insitucional de su cargo", añadió.

Por su parte, el portavoz de IU, Francisco Herrera, afirmó que la situación económica del consistorio es preocupante, aunque matizó que esa situación es buena en relación con otros ayuntamientos.

Herrera recordó al equipo de gobierno "las críticas que hacía la derecha cuando estaba en la oposición, por el agujero económico del ayuntamiento pero ese agujero ha llegado ahora a su máxima expresión", dijo.

CERRAR EL CHIRINGUITO

La operación de préstamo no cuestiona la solvencia del ayuntamiento, según Herrera quien afirmó, sin embargo, que con ella "nos ponen entre la espada y la pared, ya que si el Ayuntamiento no la ejecuta, mañana tendría que cerrar el chiriguito", motivo por el que justificó el voto favorable de su formación política.

El edil socialista Alfredo Tejero optó durante su intervención por "desmitificar el debate finaciero, para bajarlo a ver el coste que supondrá el préstamo a los ciudadanos".

Según Tejero, la deuda de 20.000 millones de pesetas supondrá un carga financiera equivalente a 2.000 pesetas que tendrán que pagar cada unidad catastral durante los dos próximos años, aunque de 1994 hasta 1996 esa cantidad ascenderá a 6.000 pesetas.

Asimismo, desde otro punto de vista, la nueva deuda significará que cada madrileño tendrá que pagar a partir de 1994 más de 17.000 pesetas, el doble del impuesto medio debienes e inmuebles.

Tejero acusó a la anterior corporación de centro-derecha de gastar lo que no tenía y lo que no iba a tener, "pensando en las elecciones y resolviéndolo ahora con una política de endeudamiento".

Para el edil socialista, quien afirmó que el equipo de gobierno no puede "por vergüenza torera" aplazar al próximo mandato la amortización de la deuda que están contrayendo en estos momentos, la corporación está conduciendo al Ayuntamiento a una situación en la que la única salida es auentar fuertemente los impuestos o declarar la quiebra.

SUBIDA DEL 15 POR CIENTO

Además de este asunto, que provocó un tenso debate entre los ediles populares y la oposición, en el orden del día figuraba también la anunciada subida del 15 por ciento de las tarifas del servicio del taxi, que fue aprobada con el voto en contra del PSOE y de IU, que la consideraron perjudicial para los usuarios.

Sin embargo, el concejal de Circulación y Transportes, José Antonio García Alarilla, señaló que esta subda es necesaria por el incremento de los costes al que han de hacer frente los taxistas, las mejoras que se exigen al vehículo y "el retraso histórico de los taxis de Madrid respecto a los de otras ciudades", sobre todo en vísperas de 1992.

El Pleno también aprobó, con el voto en contra de IU, los pliegos de condiciones a regir en la adjudicación a una empresa privada, mediante concurso, del Teléfono de Información General sobre servicios del Ayuntamiento, el 010, por un importe de 99 millones de pestas.

Los dos grupos de la oposición coincidieron en señalar que la gestión de este servicio por una empresa ajena a la Casa de la Villa permitirá a una compañía privada disponer de "grandes caudales de información, que pueden ser mal utilizado o utilizados interesadamente".

Tanto para el PSOE como para IU, que consideraron conveniente la necesidad de este servicio, deben de ser funcionarios municipales los que gestionen el teléfono.

En este sentido, el Grupo Socialista presentó una enmienda que fue aprobada, por la que la empresa adjudicataria se hará cargo del reciclaje y formación de hasta 30 funcionarios para que trabajen, junto a personal especializado, en ese servicio.

También fue aprobado, a propuesta del área de Medio Ambiente, una subvención global de 319 millones de pesetas para un total de 175 comunidades de propietarios y particulares, destinada para el cambio de la instalación de carbón de las calderas por otras menos contaminantes.

Por último, la prórroga en 45 días má del plazo que las cooperativas tienen para presentar los documentos para el "Plan 18.000", que finalizaba el próximo 8 de octubre, y la renovación de la adjudicación de la explotación de la sala de fiestas situada en la "Casa del Contrabandista", del Parque del Retiro, fueron otros asuntos, finalmente aprobados, que provocaron un enfrentamiento dialéctico entre los miembros de la corporación municipal.