Los países "Schengen" celebraron hoy en Madrid la primera reunión bajo presidencia española, durante la cual Grecia formalizó su adhesión a los acuerdos, algo que esperan sirva de ejemplo para que los estados de la Comunidad Europea que no forman parte del grupo -Gran Bretaña, Dinamaca e Irlanda- se integren en él, según dijo el secretario de Estado para las Comunidades Europeas, Carlos Westendorp.

Durante la reunión, los secretarios de Estado y los ministros de los nueve países aprobaron, entre otros asuntos, una declaración sobre los controles en las fronteras exteriores, según la cual dicho control se realizará a través de visitas conjuntas de una comisión que estará integrada por los países miembros.

Westendorp, que señaló que en la "cumbre" se ha avanzado considerablemete en la constitución de un espacio sin fronteras internas, explicó que otros temas tratados fueron una declaración sobre el control de fronteras externas específico para evitar el tráfico de estupefacientes, la adopción de un visado único y una directiva sobre el intercambio de funcionarios de enlace.

Asimismo, abordaron la situación actual en la que se encuentra el Sistema de Información Schengen (SIS), una base de datos común para los países miembros, que Westendorp calificó como el "corazón" del gupo.

Indicó que su puesta en funcionamientos está prevista para los primeros meses del próximo año, lo que, unido a la necesidad de readaptar los aeropuertos a estos acuerdos y la obligatoriedad de ratificar el convenio por los países miembros, ha retrasado la entrada en vigor de los acuerdos "Schengen".

Durante la reunión de hoy, a la que seguirá otra el 15 de diciembre también en Madrid, fueron aprobados asimismo los presupuestos del grupo para 1993, que ascienden a 360.000 millones de pesetas,que serán aportados a partes iguales por los miembros.

Westendorp señaló que, por el momento, todavía no está decidido qué país sucederá en la presidencia del grupo a España durante el próximo semestre, aunque agregó que varios gobiernos han propuesto que España continúe en ese puesto, a lo que el Ejecutivo español está dispuesto.

Finalmente, el secretario de Estado para las Comunidades Europeas informó que en el transcurso de la reunión se trató también el artículo 8.a del Tratado de Roma, relatvo a la libre circulación de personas, sobre el que dijo que los nueve países "Schengen" tienen la misma concepción: la eliminación de controles en las fronteras internas, que también desaparecerían, para hacer un espacio libre y de seguridad.

Explicó que los tres países de la CE que no forman parte del grupo son partidarios de mantener esos controles, lo que dificulta su adhesión al convenio.