La eléctrica Southern, las mineras Massey y Consol, las petroleras Ultra-Petroleum, ExxonMobil, Chevron y Canadian Natural Resources, la automovilística General Motors y la constructora Standard Pacific son las empresas que han sido incluidas en dicha lista.

Entre los inversores que han adoptado esta iniciativa se encuentran algunos de los principales fondos de pensiones estadounidenses, como el Sistema de Jubilación del Profesorado de California (CaISTRS), así como otros accionistas institucionales, entre ellos fundaciones, sindicatos y organizaciones religiosas.

También han propuesto, con el apoyo de Ceres, que se someta al voto de la junta general de accionistas de ocho de las mencionadas empresas, la adopción de medidas para la mejora de la gestión de los riesgos y oportunidades que plantea el cambio climático.