Según explicó a Servimedia un funcionario del Ayuntamiento, Dionisio Gumiel, trabajadores del consistorio localizaron esta mañana un camión blindado a las puertas del convento y decidieron avisar a la Guardia Civil.

Un sargento de la enemérita se personó con varios trabajadores municipales en el convento y comprobó que las monjas tenían toda la documentación necesaria para realizar el traslado.

La obra enviada al Museo del Prado para su restauración es un retablo barroco del siglo XVII que, según los vecinos, "es el más importante de los que quedan en el convento".

Los concentrados ante el convento, alrededor de una treintena, mostraron su indignación "ante el secretismo con el que las monjas han decidido trasladar el retablo. Según Dionisio Gumiel, "los vecinos no discuten la propiedad del retablo, sino la forma en la que han actuado, igual que la otra vez".

El pasado verano las monjas de Pastrana y los vecinos de la localidad mantuvieron un duro enfrentamiento por la intención de las religiosas de trasladar el patrimonio artístico del convento a la localidad de Membrilla (Ciudad Real).