En concreto, los troyanos "Format.A" y "Tahen" (en sus variantes A y B) tienen como objetivo las videoconsolas PSP (PlayStation Portable) de Sony, y Nintendo DS, respectivamente.

Según informó hoy Panda Software, los tres troyanos son, además, extremadamente dañinos, ya que sus ataques borran archivos críticos para el buen funcionamiento del equipo, llegando a inutilizar la consola de manera irreversible en el caso de la PSP.

Para propagarse, "Format.A" se hace pasar por una herramienta desarrollada para poder ejecutar un código no firmado en las consola de Sony.

Por su parte, el "Tahen" trata de hacerse pasar por aplicaciones no oficiales para la consola de Nintendo, pero cuando el usuario lo instala en ella, sobreescribe determinadas áreas del "firmware" (archivo ligado a una parte física de la máquina) de la consola Nintendo DS y de los dispositivos G6, XGFlash, SuperCard y GBAMP (que permiten grabar cartuchos con programas para ejecutarlos en la consola).

A primera vista, se trata de un grave problema, ya que afecta irreversiblemente a dispositivos de elevado coste económico. Sin embargo, si los usuarios se limitan a utilizar la consola de la forma en la que indican los fabricantes, la probabilidad de infección es casi nula.

Por ello, Panda Software duda de que estos códigos maliciosos puedan difundirse de forma masiva, ya que las consolas de videojuegos no están pensadas para la incorporación de programas ajenos a los fabricantes oficiales".

Para que los virus detectados hasta ahora puedan llegar a una de estas consolas, es preciso que el usuario tenga la voluntad expresa de ejecutar en su aparato aplicaciones no provenientes de desarrolladores autorizados.

Si, a pesar de todo, se desea instalar algún paquete de "software" en la consola, debería ser analizado previamente en un ordenador que cuente con un programa antivirus de confianza y perfectamente actualizado.