Esas son algunas de las características requeridas en las bases del concurso público convocado por la Dirección General de la Guardia Civil para la adjudicación de la nuva pistola de los agentes del instituto armado, al que se han presentado las marcas Beretta, Sig Sauer, F.N. y H&K.

El objetivo fundamental es que los agentes cuenten con pistolas que no se disparen accidentalmente en situaciones habituales de riesgo, como el forcejeo en la detención de delincuentes.

A este respecto, en el apartado referido al mecanismo de seguridad del arma, la Benemérita ha establecido como requisito indispensable la imposibilidad de que se produzca el disparo de la pistola carada y con el cargador puesto, aun accionando el disparador.

En este sentido, el pliego de condiciones establece que el dispositivo manual de seguridad sea colocado en forma de palanca a la derecha o a la izquierda, según se empuñe el arma para el tiro.La nueva pistola deberá reunir, entre otras, las siguientes características: habrá de ser semiautomática; del calibre 9 mm Parabellum NATO; con mecanismo de disparo doble y simple acción; que pueda desarmarse a mano, sin uso de herramientas; y que se manejable igualmente por tiradores diestros y zurdos.

Otra novedad que incorporará la nueva pistola del instituto armado será que podrá dispararse sin necesidad de que tenga el cargador puesto y siempre que tenga un cartucho en la recámara. Ello permitirá al agente cambiar de cargador manteniendo la posibilidad de abrir fuego, aun a costa de no estar alojado todavía el cargador.

En cuanto al acabado superficial del arma exterior será de color negro mate. Además, la pistola estará diseñada para ua duración de todas sus partes principales (cañón, cierre y armazón) superior a los 10.000 disparos, mientras que las demás piezas deberán superar los 5.000 disparos.

Actualmente, la Guardia Civil utiliza la veterana pistola STAR BM y un modelo superior llamado STAR 30 M. Esta es la tercera ocasión en que tiene lugar un concurso para la Declaración de necesaria Uniformidad del arma corta reglamentaria en la Guardia Civil, tras haber quedado desiertos los concursos convocados con anterioridad en 1994 y1996, según informa en la Revista de la Guardia Civil.