La resolución, referida en su mayor parte al ánalisis de las elecciones y del nuevo mapa político, dedica su apartado final a condenar la actitud del sector que lidera Julio Anguita hacia las voces críticas dentro de IU.

Los renovadores reclaman un debate "sereno y sincero" en laorganización tras el descalabro del 3-M, que consideran que no puede ser afrontado "con descalificaciones" ni con la "siembra irresponsable de sospecha sobre la lealtad de nadie".

"Tampoco con una personalización de la política de IU que sólo tiene la consecuencia de impedir un debate político", agrega el texto.

La resolución hace también una alusión a las declaraciones hechas hoy a Servimedia por el secretario de Organización de IU, Pedro Granados, en las que advierte que los estatutos de la coaición no contemplan la posibilidad de que la corriente crítica se transforme en partido político.

El escrito lamenta que se hagan "invocaciones estatutarias, desde la responsabilidad organizativa, para negar a una parte de la organización los derechos de militancia política de los que otros disponen".