Así se afirma en la ponencia política que servirá de base para la convención que celebrará la corriente el próximo 15 de enero, a la que ha tenido acceso Servimedia.

El documento arremete duramente contra la estrategia de "confrontación global y descalificadora" que mantiene contra el Gobierno la dirección de IU que lidera Julio Anguita.

"A lo largo del proceso post-electoral, Izquierda Unida ha concurrido en una posición de debilidad y sin voluntad de compromiso político con una estabildad que ayude a superar la grave crisis que vive el país. Esta posición nos ha impedido articular una opinión social que obligara a Felipe González a orientar su política en otra dirección", indica la ponencia.

Para Nueva Izquierda, las movilizaciones que promueve la dirección de IU parecen no tener otro objetivo político que la "confrontación o la desestabilización del Gobierno". Ello profundiza, a su juicio, el aislamiento politico y social de IU.

"IU no puede aparecer como una fuerza contrariaal pacto", asegura el documento, que juegue al "cuanto peor mejor". "Esa política le aleja de los sindicatos, que cada vez más prescinden de lo que IU-IC pueda opinar".

Para los redactores de la ponencia, IU ha consolidado desde las elecciones un "doble lenguaje" de intentar relaciones con el PSOE mediante solicitud de entrevistas" y deslegitimarle como instrumento de gobierno.

Bajo el epígrafe de "Reconsiderar la propuesta política", el documento reclama a la mayoría de Anguita que sustituya su olítica de confrontación por un intento de generar nuevas relaciones de "convergencia" en el seno de la izquierda española, que hagan posible una nueva situación política de progreso.