NUCLEARES. GREENPEACE RECLAMA UN REFERENDUM PARA CERRAR LAS CENTRALES NUCLEARES

MADRID
SERVIMEDIA

La organización ecologista Greenpeace cree que el Gobierno español debería convocar un referéndum para consultar a la población si apoya o se opone al cierre de las centrales ucleares, como ocurrió en Suecia.

Carlos Bravo, portavoz de Greenpeace España, declaró hoy a Servimedia que "estamos totalmente de acuerdo con una iniciativa de este tipo, porque los ciudadanos tienen derecho a opinar y decidir sobre una cuestión vital para las generaciones futuras".

Bravo se mostró convencido de que el resultado del referéndum sería claramente favorable al cierre definitivo de todos los reactores nucleares, "ya que las encuestas del Centro de Investigaciones Sociológicas revelanque más del 60 por ciento de la población se opone a las centrales nucleares y más del 98 por ciento está en contra de que se instale un 'cementerio' nuclear en su municipio".

Greenpeace entiende que el cierre de las centrales constituye el primer paso para encontrar una solución a la gestión de los residuos radiactivos. Por este motivo, la organización ecologista insiste en que no se sentará a negociar una salida al problema hasta que no se clausuren todos los reactores, tal y como ocurrió en Italiasucederá en Suecia.

"Sólo nos sentaremos para encontrar una solución a los residuos radiactivos cuando se dejen de producir, para lo cual es necesario cerrar las centrales", apuntó Bravo.

Los ecologistas afirman que el cierre de los reactores es totalmente viable en España, por lo que "se trata de una cuestión de voluntad política".

Según Bravo, prescindir de la energía nuclear en España resultaría más fácil que en Suecia, ya que en el país nórdico hay doce reactores y en España nueve, de ls cuales dos, Zorita y Garoña, han cumplido veinticinco años, por lo que Greenpeace asegura que están totalmente amortizados.

Además, mientras que en Suecia el 52 por ciento de la electricidad que se consume es de origen nuclear, en España está por debajo del 40 por ciento. Greenpeace también argumenta que la potencia nuclear instalada es excesiva, puesto que el consumo de electricidad de origen nuclear nunca se acerca al total.

Para Carlos Bravo, estos datos demuestran que la decisión que se ha doptado en Suecia se podría secundar en España sin que ello supusiera un "trauma" económico para las compañías propietarias y sin que repercutiera notablemente en la tarifa de la luz.

Asimismo, Greenpeace sostiene que el desarrollo tecnológico que han alcanzado las energías renovables y la cada vez mayor implantanción del gas hace que en la actualidad existan alternativas a la nuclear.

(SERVIMEDIA)
05 Feb 1997
GJA