La proposición no de ley, que fue presentada en el Registro del Congreso en marzo del año pasado, pide que se acometa el plan de cierre de las centrales teniendo en cuenta a los sectores sociales implicados, los partidos y las organizaciones ecologistas.

Iniciativa per Catalunya-Verds plantea que, una vez acordado el cierre de las nucleares, se redacte un nuevo Plan de Gestión de Residuos Radiactivos que especifique un emplazamiento en superficie para estos desechos, cuya ubicación haya sido previamente consensuada.

Asimismo, Iniciativa pide que mientras se acomete este plan, los consumidores que lo deseen puedan destinar el 1,3 por ciento del recibo de la luz a la promoción de las energías limpias, y no a la gestión de los residuos radiactivos.

Esta propuesta se debatirá pocos días después de que el secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, defendiera un plan para cerrar las centrales nucleares en un plazo de 15 años.

Sin embargo, el Gobierno se ha mostrado partidario de agotar la vida útil de estas instalaciones, que fija en 40 años, por lo que algunas, como Vandellós II y Trillo, podrían seguir en activo hasta el año 2027.